Me llamo David Maroto Ramos soy arquitecto colegiado 11271 en COACM y aparejador colegiado 654 en COAATCR. Hace un año decidí crear mi propia empresa constructora con el objetivo de ofrecer un servicio completo y profesional a aquellas personas que sueñan con construir su vivienda y no dan el paso por la gran incertidumbre y riesgos a los que se exponen.
Siempre he pensado que el éxito, sea cual sea el proyecto, se encuentra después de largas noches de estudio y días de trabajo muy intenso.
Estoy plenamente convencido que la preocupación por los pequeños detalles en cada momento del proyecto y en cada paso de la construcción, son los fundamentos principales en los que se apoyará a posteriori el sueño de haber construido tu casa.
¿Cómo?
A lo largo de mi carrera profesional he podido comprobar en 
multitud de ocasiones, que las dificultades son una verdadera oportunidad para profundizar más en la adquisición de nuevos conocimientos, en el desarrollo de tus capacidades y poder poner en marcha nuevos procedimientos que permitan una mejora cualitativa de los procesos desarrollados hasta entonces.
El estudio detallado y el análisis minucioso, permiten realizar un filtrado eficaz de toda la información a la que tenemos acceso para poder desarrollar proyectos equilibrados, tanto en el diseño, como en la gestión de recursos necesarios para ello.
El programa de necesidades, el diseño, las relaciones con el entorno, constituyen algunas de las variables más importantes a la hora de proyectar. De la misma forma la buena planificación, la gestión de los recursos, la investigación de nuevas alternativas de gestión energética, constituyen factores decisivos a la hora de concluir la ejecución de tu vivienda de forma satisfactoria.
Una planificación real, basada en el conocimiento detallado de las circunstancias particulares de cada obra de construcción, nos permitirá establecer unas condiciones adecuadas para que el desarrollo de tu proyecto particular, se produzca con unos niveles de incertidumbre mínimos evitando así imprevistos desagradables, de los que tantas veces habrás oído hablar.
¿Cuándo?
La actividad profesional que vengo desarrollando desde el año 2000 me proporciona una extensa perspectiva del proceso constructivo: el trabajo de gestión desarrollado para diversas empresas promotoras y constructoras de diversa magnitud desde el año 2000 a 2003; la colaboración en la redacción de proyectos de distinta índole desde el año 2003 hasta la fecha actual; el conocimiento detallado del mercado inmobiliario gracias a mi trabajo como tasador para diversas sociedades de tasación, desde el año 2002 hasta hoy; el contacto permanente con compañeros de disciplinas muy diversas que desarrollan su actividad en diversos puntos del planeta.
Todo ello me ha empujado a comprender la necesidad de ofrecer un servicio completo con objeto de garantizar unos niveles de satisfacción aptos dentro de un mercado profundamente maltratado por tantos factores ajenos a una búsqueda legítima de la excelencia.
El conocimiento en perspectiva y en detalle de la organización de la actividad inmobiliaria, me permite ofrecer garantía de satisfacción, en las diversas fases del proceso constructivo, desde la elección del solar, hasta la de sistemas constructivos, de materiales, de instalaciones, de acabados, de mobiliario, iluminación, sin olvidar la gestión de los recursos disponibles , seguimiento preciso y profundo de la ejecución de las diversas partidas de obra, su planificación y el estudio constante de las últimas propuestas presentes en el mercado. Con el objetivo claro de hacer que construir tu proyecto resulte un proceso apasionante y motivador.
¿Por qué?
Son múltiples y diversas las razones que me han empujado a plantear de esta forma el desarrollo de mi profesión. Sobretodo se trata de la pasión que provoca saber que la arquitectura influye directamente en la vida de las personas y en su manera de ver el mundo.
Porque construir tu casa es un momento muy importante en la 
vida de todos aquellos que deciden afrontar ese reto, puesto que allí, vivirás momentos muy importantes de tu vida y de la de los tuyos. Porque los sueños se persiguen con entusiasmo y se trabajan con ilusión. Porque la manera como los buscas, influye en la vida de los que te rodean. Porque la arquitectura permite el estudio de las relaciones que existen entre disciplinas tan diversas como, la filosofía, la sociología, el marketing, la física, la química, la economía, la psicología, el arte, la ecología, la educación, etc., obligándote como arquitecto a aceptar el compromiso y el reto de intentar descifrar todos aquellos matices que permitan que esas relaciones se produzcan de forma equilibrada y tranquila en la redacción de tu proyecto.
